Panamá: Epicentro del Café de Especialidad en el Mundo

El café no es simplemente una bebida: es cultura, historia, ciencia y pasión. En las últimas décadas, el concepto de café de especialidad ha transformado la forma en que el mundo disfruta y entiende esta bebida milenaria. En ese contexto, Panamá ha emergido como una potencia global, a pesar de su tamaño geográfico reducido en comparación con gigantes como Brasil o Colombia.

Este artículo explora las razones por las que Panamá es considerado un epicentro del café de especialidad. Revisaremos su historia, los factores naturales que le han permitido sobresalir, la importancia de la variedad Geisha, los procesos innovadores que adoptan sus productores y la manera en que eventos como el Panama Coffee Festival consolidan su reputación internacional.

Panama Coffee Festival

Panama Coffee Festival 2025

Historia del café en Panamá

El café llegó a Panamá en el siglo XIX y rápidamente encontró en la provincia de Chiriquí el espacio perfecto para desarrollarse. Regiones como Boquete, Volcán y Renacimiento ofrecieron altitudes ideales, suelos volcánicos ricos en nutrientes y un clima templado que favorecía el cultivo de variedades arábicas de alta calidad.

A diferencia de otros países, Panamá nunca apostó por el café como producto masivo. Desde sus inicios, la producción fue relativamente pequeña, pero enfocada en la calidad.

Esta decisión estratégica marcó la diferencia: en lugar de competir por volumen, los productores panameños buscaron competir por excelencia.

En la década de 1990, varios caficultores comenzaron a experimentar con mejores prácticas agrícolas, selección manual de granos maduros y procesos de beneficio innovadores.

Ese compromiso, combinado con la organización de subastas internacionales como Best of Panama bajo la organización de la SCAP (Specialty coffee Association of Panama), puso al café panameño en el mapa global.

fincas de café en Panamá

El fenómeno del Geisha

El mayor salto en la historia cafetera de Panamá ocurrió con la variedad Geisha. Originaria de Etiopía, fue introducida en el país en la segunda mitad del siglo XX, pero no fue hasta los años 2000 que los productores descubrieron su verdadero potencial en las tierras altas de Boquete.

En 2004, un lote de Geisha de la finca Hacienda La Esmeralda rompió récords al venderse en más de $20 la libra en subasta, algo impensable en ese momento.

Desde entonces, el precio ha seguido aumentando, alcanzando cifras de más de $30,000 el kg en ediciones recientes casualmente con cafés de finca la Esmeralda.

Más allá del precio, lo que distingue al Geisha panameño es su perfil sensorial: notas florales de jazmín, toques cítricos, cuerpo sedoso y una complejidad aromática que sorprende incluso a catadores experimentados.

Esto lo convirtió en un ícono del café de especialidad y en un embajador de la marca Panamá en el mundo.

Cafés locales en proceso de filtrado

Microclimas y terroir

 Uno de los secretos mejor guardados de Panamá es su geografía. A pesar de ser un país pequeño, su ubicación entre dos océanos y la presencia de la Cordillera Central generan una diversidad de microclimas extraordinaria.

En Boquete, por ejemplo, se pueden encontrar fincas a 1,200–1,800 metros sobre el nivel del mar, con temperaturas frescas, lluvias frecuentes y suelos volcánicos que enriquecen el cultivo.

Estos factores, conocidos como terroir, influyen directamente en el sabor del café, permitiendo que cada finca produzca perfiles únicos.

Además, Panamá es pionero en prácticas sostenibles: muchos caficultores han implementado sombras naturales, cultivos orgánicos y proyectos de conservación de agua.

Esto no solo mejora la calidad, sino que también conecta con la demanda internacional de cafés producidos con responsabilidad ambiental.

Procesos innovadores y fermentaciones

El café panameño también ha destacado por su capacidad de innovar en los procesos de beneficio.

A diferencia de países que mantienen prácticas tradicionales más homogéneas, en Panamá se experimenta constantemente con nuevas técnicas: Honey process, fermentación anaeróbica y maceración carbónica son algunas de las más populares.

El Honey process deja parte del mucílago en el grano durante el secado, aportando dulzura y cuerpo. La fermentación anaeróbica se realiza en tanques herméticos, lo que produce sabores frutales y complejidad.

La maceración carbónica, inspirada en el vino, utiliza CO₂ para controlar la fermentación y crear perfiles aromáticos intensos. Estas técnicas no solo diversifican la oferta de los productores panameños, sino que también generan interés en mercados internacionales dispuestos a pagar precios premium por experiencias únicas en taza.

Café Geisha panameño

Café Geisha panameño

La cultura cafetera panameña

En Panamá, el café ha dejado de ser solo un producto agrícola para convertirse en una experiencia cultural.

Ciudades como Boquete y Volcán han visto cómo las fincas abren sus puertas a turistas que buscan aprender sobre el proceso del grano a la taza.

Los baristas panameños también juegan un papel crucial. Son embajadores de esta cultura, explicando los procesos, enseñando métodos de filtrado y conectando al consumidor final con la historia detrás de cada taza.

Concursos de barismo, campeonatos de latte art y talleres especializados se han multiplicado, fortaleciendo esta identidad. El turismo del café ha crecido de manera significativa, posicionando a Panamá no solo como productor, sino como destino para los amantes del café de especialidad.

Panamá en el escenario internacional

El prestigio del café panameño se ha consolidado gracias a su presencia en subastas internacionales y ferias como la Specialty Coffee Expo en Estados Unidos o el World of Coffee en Europa. Allí, los lotes panameños suelen destacarse por su calidad y singularidad.

El Best of Panama, organizado anualmente por la Asociación de Cafés Especiales de Panamá (SCAP), es hoy una de las competencias más prestigiosas del mundo. En ella, jueces internacionales catan los mejores lotes del país, consolidando la reputación de los productores panameños.

Este reconocimiento ha tenido un impacto económico positivo: los altos precios en subastas no solo benefician a grandes fincas, sino que también inspiran a pequeños productores a mejorar sus prácticas, creando un ecosistema más sólido y competitivo.

Aunado a ello, en el 2026 Panamá fue elegido como sede del World Of Coffe, en donde recibiremos más de 30,000 personas entre productores, tostadores, compradores, actores y consumidores del café a nivel mundial.

Specialty coffee Panama

El Panama Coffee Festival

En este contexto surge el Panama Coffee Festival, que en su primera edición en Boquete (junio 2025) reunió a productores, baristas, turistas y compradores internacionales.

El éxito de esa edición demostró que el país está listo para organizar eventos de nivel internacional que no solo promueven el café, sino también la cultura y el turismo.

La edición de 2026, que se celebrará en Ciudad de Panamá del 22 al 24 de enero, marcará un nuevo hito. Con un formato que incluye un día exclusivo de rueda de negocios B2B y dos días abiertos al público, el evento promete convertirse en la principal vitrina del café panameño ante el mundo.

Vive la experiencia del café panameño en el Panama Coffee Festival 2026, enero en Ciudad de Panamá. Compra tus entradas en www.panamacoffeefestival.com y sé parte de la historia del café de especialidad.

Panama Coffee Festival



Anterior
Anterior

Lo que nos dejó la primera edición del Panama Coffee Festival 2025